Icono del cine fallece dejando un legado de personajes inolvidables
Este lunes, lamentablemente nos despedimos de un grande de la actuación, James Earl Jones, que a sus 93 años nos dejó. Reconocido por su voz profunda y distintiva, Jones dio vida a personajes emblemáticos como Darth Vader en Star Wars y Mufasa en El Rey León, consolidándose como uno de los actores afroamericanos más influyentes de su época.
A lo largo de su extensa carrera, Jones logró brillar tanto en Hollywood como en Broadway, superando obstáculos desde su juventud. Debutó en Broadway en 1958 con tan solo 27 años, dejando una huella tan profunda que el teatro Cort Theatre, donde se presentó, eventualmente llevaría su nombre.
Su incursión en el cine se dio en 1964 de la mano de Stanley Kubrick en la película Dr. Insólito, interpretando al teniente Lothar Zogg. A lo largo de los años, participó en más de 80 producciones cinematográficas, destacándose en obras como The Man en 1972, Conan el Bárbaro en 1982 y El campo de los sueños en 1989, entre otras.
Además de su trabajo en la gran pantalla, Jones dejó un legado en la televisión y el teatro, siendo recordado por su participación en el remake de El Rey León en 2019 y en Un príncipe en Nueva York 2 en 2021.
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James Earl Jones fue un artista multifacético y premiado, siendo reconocido con cuatro premios Tony, una nominación al Oscar y varios premios Primetime Emmy. Su presencia imponente y su talento vocal lo convirtieron en una figura destacada tanto en Shakespeare como en la narración de documentales y comerciales icónicos.
Además de su carrera artística, Jones tuvo dos matrimonios, el segundo con la actriz Cecilia Hart, con quien tuvo un hijo. A lo largo de su vida, enfrentó desafíos de salud, siendo diagnosticado con diabetes tipo 2 en la década de 1990.