Conductor involucrado en incidente en Azua recupera su libertad tras pagar fianza de un millón de pesos
En Las Yayas de Viajama, el Juzgado de Paz Ordinario dictaminó una garantía económica de un millón de pesos para Ángel Encarnación Bautista, conductor del camión Daihatsu rojo involucrado en un trágico suceso que causó fatalidades y heridas a varias personas.
Además de la fianza, se le exige comparecer regularmente durante seis meses y se le ha restringido salir fuera del país como parte de las medidas cautelares.
Las acusaciones contra Encarnación Bautista incluyen conducción temeraria, exceso de velocidad y ocasionar lesiones y muertes de manera involuntaria.
Según el Ministerio Público, el conductor, residente en San Juan, transitaba a alta velocidad de forma imprudente, negligente y temeraria al momento del incidente, el cual ocurrió durante la madrugada del pasado 1 de septiembre en la carretera San Juan-Azua, cerca de un establecimiento de la zona.
Las víctimas, que sufrieron traumas graves en su mayoría, fueron atropelladas por el camión, resultando en seis fallecidos y más de 40 personas heridas.
El Ministerio Público insiste en la necesidad de aplicar la prisión preventiva a Encarnación Bautista, argumentando su propensión a fugarse y su historial de comportamientos similares. Además, subraya que la seguridad ciudadana se ve comprometida debido a sus acciones en infracciones de tránsito.
Existen pruebas que vinculan al acusado con los delitos imputados, los cuales se clasifican provisionalmente como violaciones a varios artículos de la Ley 63-17 sobre Tránsito Vial.
Adicionalmente, se ha compartido el testimonio de la madre de una de las víctimas, expresando su dolor por la pérdida irremediable de su hijo en este trágico suceso.
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Revelaciones tras accidente en Azua que conmocionó a la región
El trágico suceso en Azua ha revolucionado a la comunidad, especialmente a familiares y amigos de las personas afectadas por el accidente.
La madre de uno de los fallecidos ha manifestado que su hijo llevaba tiempo sin visitar el lugar donde perdió la vida, creando un impacto emocional muy profundo en ella y en su entorno.