El consumo excesivo de sustancias podría alejar visitantes del parque

En la ciudad de Nueva York, el famoso Central Park, situado en Manhattan y extendiéndose por unos 3,4 kilómetros cuadrados, atrae anualmente a más de 37 millones de visitantes, incluyendo a una notable cantidad de dominicanos. Operando desde las 6:00 de la mañana hasta la 1:00 de la madrugada, el parque enfrenta ahora el riesgo de disminuir su flujo de visitantes debido al abuso generalizado de sustancias narcóticas, tal como reportan diversos medios de comunicación en inglés.

Con un incremento en los fallecimientos por sobredosis en la metrópoli, la preocupación crece en torno a la seguridad del Central Park, cuya imagen se ve afectada por la elevada incidencia de consumo de estupefacientes.

Según un reportaje efectuado por Gothamist durante una visita al emblemático sitio, se encontraron escenas alarmantes de individuos autoadministrándose drogas, además de ropa abandonada, bolsas de compra repletas de excremento humano, jeringuillas destapadas y una proliferación de tubos de ensayo con sustancias psicoactivas y cápsulas de fentanilo, vulgarmente designadas como ‘papelera de drogas’.

Los residentes cercanos al parque expresan su frustración, manifestando que sus repetidos contactos con representantes políticos locales y entidades gubernamentales, así como con la organización Central Park Conservancy, no han logrado generar mejoras significativas en la situación actual del parque.

La ciudad de Nueva York ha visto recientemente un preocupante récord en muertes por sobredosis, con una persona falleciendo cada tres horas por esta causa. Los opioides juegan un papel principal en el 84 % de estos decesos.

Durante el año 2023, la ciudad registró 386 homicidios, mientras que en 2022 fueron 438. En contraste, más de 3,000 personas murieron debido a sobredosis de drogas en el año 2022, subrayando la severidad de esta crisis.

A pesar de las preocupaciones actuales, el Central Park aún destaca por su vastedad, superando en tamaño a las dos naciones más pequeñas del mundo; es prácticamente el doble del tamaño de Mónaco y cerca de ocho veces mayor que la Ciudad del Vaticano.

El 12 de abril de 2017, el parque fue añadido a la lista indicativa de Estados Unidos para la UNESCO, siendo considerado para una futura nominación como Patrimonio de la Humanidad, un testimonio de su valor cultural y natural incomparable.

Consecuencias Socioculturales

Este fenómeno no solo representa un riesgo para la seguridad y bienestar de los visitantes y residentes cercanos, sino que también plantea un peligro en términos de preservación del espacio verde más icónico de la ciudad de Nueva York. La continua presencia y visibilidad del consumo de drogas en locaciones tan emblemáticas pueden tener efectos duraderos en la percepción pública del parque, afectando potencialmente su legado histórico y relevancia cultural.

Más información: La influencia de los puntos de venta de drogas en la dinámica social de los espacios públicos: un análisis.
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