Explorando un episodio enigmático de las relaciones bilaterales
En un artículo previo, se relató el enfrentamiento ocurrido en Alto Velo, donde el gobierno de la República Dominicana envió una delegación para desalojar a ciudadanos estadounidenses que estaban explotando el guano en la isla. A pesar de los intentos del representante del capitán Kimball por mantenerse en la isla amparado en una ley estadounidense, finalmente fueron llevados a Santo Domingo por la goleta “Mercedes”.
Al llegar a la capital dominicana, el gobierno de Pedro Santana decidió entregar a los invasores, junto con sus pertenencias y herramientas utilizadas en la extracción del guano, al cónsul Jonathan Elliot, sin someterlos a juicio ni confiscar sus bienes. Parecía que el interés principal era recuperar la propiedad de Alto Velo.
El cónsul estadounidense expresó su esperanza de resolver la situación sin intervención oficial, pero con la llegada del capitán Kimball, los conflictos entre la Compañía Petterson y Murguiendo, y los gobiernos dominicano y estadounidense se agudizaron.
El gobierno de Santana descubrió que los extranjeros habían enviado grandes cantidades de guano a Estados Unidos, mientras que el capitán Kimball argumentaba que las ventas no habían sido tan lucrativas como se estimaba. Las negociaciones entre las partes se complicaron, y en medio de esto, los estadounidenses intentaron escapar clandestinamente en la goleta “Alice Mowe”, siendo detenidos por las autoridades dominicanas.
En enero de 1861, la Compañía Patterson y Murguiendo solicitó al secretario de Estado de Estados Unidos, Jeremiah S. Black, que protestara ante el gobierno dominicano. Sin embargo, Black argumentó que la administración de Santana tenía jurisdicción sobre la isla, y decidió enviar a William Cazneau a investigar el caso, a pesar de su previa participación en el conflicto.
El presidente Grant y el conservadurismo actual en Estados Unidos.
Explorando nuevos horizontes en las relaciones internacionales
En medio de las tensiones por la disputa de Alto Velo, se evidenció la complejidad de las relaciones bilaterales entre la República Dominicana y Estados Unidos. A través de negociaciones y confrontaciones, ambas naciones intentaban velar por sus intereses y derechos legales, lo que resultó en situaciones inesperadas y decisiones controversiales en el tratamiento de este enigmático capítulo histórico.