La tasa de personas afectadas por la falta de alimentos suficientes descendió notablemente de un 8.3% en 2020 a un meritorio 4.6% en 2023.
Desde el gobierno dominicano, Homero Figueroa, responsable de Estrategia y Comunicación, destacó este logro como un hito en la lucha contra el hambre, de acuerdo con los datos suministrados por la FAO. En tres años, el país ha visto una disminución del 55% en su lucha contra la desnutrición.
El cambio registrado en el índice de subalimentación, de un 8.3% a un 4.6% en tan solo tres años, ha significado un cambio positivo para cerca de 500,000 hogares en el país. Este progreso es una evidencia palpable del esfuerzo gubernamental por erradicar la inseguridad alimentaria.
El vocero presidencial reveló, mediante un informe reciente de la FAO en Brasil, la reducción de la subalimentación en la República Dominicana, marcando un antes y después en la lucha contra la falta de alimentos, liberando a 500,000 familias del espectro del hambre.
Detalló que este progreso es gracias a las políticas implementadas en áreas clave, tales como la agropecuaria. La constante atención al sector por parte del Ministerio de Agricultura, asegurando la estabilidad y el aumento en la producción de alimentos básicos, ha sido esencial, igualmente la política de créditos del Banco Agrícola ha jugado un papel crucial.
Figueroa también resaltó el impulso dado a los programas de alimentación escolar, las ayudas del programa SUPÉRATE, la expansión e inclusión de comedores económicos y mercados populares de INESPRE, todos contribuyendo significativamente a la mejora en la distribución y acceso a alimentos para más de 1.5 millones de familias en situación de vulnerabilidad.
El éxito alcanzado hasta ahora refuerza la determinación de continuar centrados en intervenciones directas y específicas, apuntando hacia la meta de erradicar por completo el hambre en la nación. Asegurar una alimentación adecuada y accesible para todos es un objetivo alcanzable mediante el trabajo conjunto, enfatizó el comunicado.
El compromiso por erradicar el hambre se ve reflejado no solo en palabras sino en acciones concretas y resultados tangibles, demostrando una vez más que el esfuerzo conjunto y las políticas bien direccionadas pueden marcar la diferencia en la vida de miles de familias dominicanas, caminando firme hacia la seguridad alimentaria para todos.
Gracias a una estrategia bien articulada y el compromiso a nivel gubernamental, el país ha logrado un avance notable en la batalla contra la desnutrición, demostrando que es posible combatir efectivamente este fenómeno a través de acciones concretas y colaboración.
Este logro es un claro ejemplo de cómo el enfoque en sectores determinantes como la agropecuaria y un sistema de ayuda bien estructurado pueden hacer una gran diferencia en la lucha contra la escasez de alimentos, abriendo nuevos caminos para garantizar el bienestar alimentario en la nación.
Superar la desnutrición es un desafío que demanda la suma de todos los esfuerzos y este ejemplo dominicano resalta la importancia de una visión integral en la solución de problemas globales, siendo un modelo a seguir para otros países en la búsqueda de la erradicación del hambre.