Desde Washington, se anunció que el mandatario de Estados Unidos, Joe Biden, emitió una declaración de emergencia para socorrer a Puerto Rico tras el azote del huracán Ernesto, como lo comunicó la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) el martes.
Este mandato presidencial habilita a la agencia a liderar las acciones de respuesta con el objetivo de aliviar las penurias y adversidades experimentadas por los residentes de la zona.
La intención detrás de esta decisión es facilitar asistencia a los 78 municipios del territorio, enfocándose en salvar vidas, custodiar propiedades, y asegurar la salud y bienestar público, además de intentar mitigar o impedir los riesgos de un desastre mayor.
Según FEMA, esta autorización le permite identificar, activar y proveer, según considere necesario, los equipos y recursos destinados a aliviar los efectos de la emergencia.
El Servicio Nacional de Meteorología (SNN), con sede en San Juan, ha emitido advertencias sobre posibles inundaciones súbitas en amplias áreas de Puerto Rico debido a las intensas precipitaciones.
Existe una preocupación creciente por el incremento en los niveles de ríos como el de La Plata, que vierte sus aguas en el Atlántico cerca de Toa Baja, debido a las abundantes lluvias y potentes ráfagas de viento que han provocado estragos en estructuras residenciales y derribado árboles y postes eléctricos.
Varias vías en sectores del norte, centro y este de la isla se hallan bloqueadas por acumulaciones de agua, caída de árboles o desprendimientos de tierra.
En adición, la declaración facilitada por el presidente Biden permite una mejor coordinación de los esfuerzos de rescate y asistencia en el territorio puertorriqueño, enfatizando la importancia de trabajar mancomunadamente para superar los retos impuestos por el huracán Ernesto. Esta estrategia incluye no solo el rescate y soporte inmediato sino también la planificación de estrategias a largo plazo para la recuperación y fortalecimiento de la infraestructura crítica afectada.
El enfoque de FEMA en movilizar y proporcionar recursos necesarios es fundamental para garantizar una respuesta eficiente y efectiva ante la emergencia, subrayando la importancia de preparación y respuesta rápida para proteger a las comunidades vulnerables en situaciones de crisis.