Ataques aéreos en Líbano y Hezbolá: Israel realiza acciones preventivas ante situación delicada
Las tensiones entre Israel y el grupo armado de origen libanés conocido como Hezbolá han llegado a un punto crítico en las últimas horas.
En respuesta a supuestas preparaciones por parte de Hezbolá para un ataque, el ejército israelí llevó a cabo una operación preventiva utilizando un gran número de aviones que atacaron múltiples ubicaciones en el sur de Líbano.
Las autoridades militares de Israel justificaron estas acciones como medidas de prevención, argumentando que Hezbolá estaba planeando lanzar cohetes hacia territorio israelí.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, mencionó la detección de estos preparativos como el motivo detrás de la respuesta militar, que resultó en heridas para al menos dos personas durante los ataques.
Por su parte, Hezbolá no tardó en reaccionar disparando una gran cantidad de cohetes hacia objetivos militares en el norte de Israel, en lo que consideraron como una primera fase de represalia por eventos previos. A pesar de los ataques, no hubo reportes de daños humanos en Israel.
En el transcurso de las hostilidades, Hezbolá afirmó haber disparado más de 320 cohetes hacia territorio israelí, mientras que el gobierno de Israel confirmó la muerte de un soldado en el norte del país.
Este enfrentamiento marca un incremento significativo en las tensiones entre Israel y el grupo militar chiita respaldado por Irán, representando uno de los episodios más graves desde el conflicto del año 2006.
El argumento de legítima defensa fue la justificación presentada por el vocero militar israelí, Daniel Hagari, para las acciones aéreas llevadas a cabo por su país, enfocándose en la neutralización de lanzacohetes de Hezbolá.
Las Fuerzas de Defensa de Israel informaron que la mayoría de los lanzadores de cohetes de Hezbolá tenían como blanco el norte de Israel, con algunos orientados hacia el centro del país.