Mujer condenada a prisión por extenso período
Ayer se dictó la condena de siete años de prisión para Elizabeth Silverio, quien se hace llamar neurocientífica, por cometer estafa a través de la práctica ilegal de la medicina especializada.
Las juezas del tercer tribunal colegiado del Distrito Nacional, Ailin Ventura Jiménez, Leticia Martínez y Evelyn Rodríguez, también ordenaron a Silverio pagar una indemnización de RD$2 millones a cada uno de los demandantes que actuaron como partes civiles, además de cubrir los costos del proceso.
Silverio ha sido acusada por el Ministerio Público de infringir las leyes contempladas en los artículos 151 y 4-105 del Código Penal, así como el numeral 7 del artículo 156 de la Ley General de Salud 42-01, causando perjuicio a las víctimas, demandantes civiles y al Estado dominicano.
Para más detalles: Las declaraciones del abogado de Elizabeth Silverio tras la sentencia de 7 años en prisión
La sociedad ha puesto sus ojos en este caso, generando un intenso debate sobre la ética en la práctica médica y sus implicaciones para quienes confían en los profesionales de la salud para el cuidado de sus seres queridos.
¿Fallo influido por la opinión pública?
Al abandonar la sala del tribunal, tanto la condenada como sus abogados anunciaron su intención de apelar la sentencia, argumentando que la decisión de las juezas fue influenciada por la cobertura mediática.
En sus palabras: “No me rendiré, porque demostré claramente que no causé daño a ninguno de esos niños, no les hice ningún mal…”.
Asimismo, expresó sus dudas sobre la imparcialidad del tribunal, insinuando que la sentencia pudo haber sido motivada por la presión de padres que falsearon información para dañar su reputación.
Además, cuestionó por qué los padres tardaron tanto en darse cuenta de la supuesta problemática, solo reaccionando cuando el escándalo se hizo público el 17 de mayo.
Este caso resalta la importancia de la transparencia en la práctica médica y la responsabilidad de los profesionales de la salud en garantizar la integridad y el bienestar de sus pacientes en todo momento.