Documentación utilizada para verificar la nacionalidad de un individuo
Al detener a Franklin Dinol en un control migratorio, el policía le indicó que era haitiano según sus documentos de identidad. Este incidente revela la percepción arraigada en sectores dominicanos de que una persona de origen haitiano no puede ser considerada dominicana, idea respaldada por la controvertida sentencia 168-13, la cual tiene efecto retroactivo. Asimismo, pone de manifiesto el racismo presente en la sociedad dominicana, exacerbado por las recientes deportaciones sin proceso adecuado.
Tras ser llevado a la comisaría, Dinol fue liberado no por procedimientos oficiales de deportación, sino gracias a la intervención de activistas sociales y religiosos. El motoconchista que lo transportaba, de origen haitiano y con documentos vencidos bajo la Ley 169/14, también fue detenido. Estas situaciones son comunes entre los cerca de 200 mil ciudadanos desnacionalizados por la mencionada sentencia. La frase “haitiano con documento”, tal como mencionó Hugo Tolentino, incita a reflexionar sobre la injusticia y el sufrimiento que muchos enfrentan desde temprana edad.
Extra: La importancia de la documentación en procesos migratorios.
Raíces históricas de las deportaciones y la identidad nacional
El prominente líder dominicano Peña Gómez, a pesar de su valioso legado en la democracia del país, fue rechazado como dominicano completo por ciertos sectores oligárquicos y de clases medias, impidiéndole así acceder a la presidencia. La premura y falta de sensatez en las deportaciones masivas plantea interrogantes sobre su origen y propósito. El racismo y el antihaitianismo han permeado la sociedad dominicana, influyendo en decisiones políticas desatinadas. Es necesario reflexionar sobre estas corrientes perjudiciales que persisten en varios ámbitos del poder.
Extra: La influencia de las narrativas xenófobas en la política.
Implicaciones políticas y sociales de las deportaciones masivas
Además de las motivaciones políticas, las deportaciones masivas podrían tener como objetivo presionar a las potencias implicadas con Haití para que brinden mayor apoyo al país vecino. Sin embargo, esta medida resulta contraproducente y poco efectiva. Promover la idea de una identidad dominicana homogénea y la demonización de los inmigrantes haitianos solo contribuye a crear divisiones y perpetuar mitos nefastos. Es urgente abordar estas problemáticas desde una perspectiva más equitativa y comprensiva.
Extra: La necesidad de una política migratoria humana y justa.
Cuestionando las deportaciones masivas y la retórica antiinmigrante
El discurso intolerante y xenófobo hacia los nacionales haitianos ha alcanzado niveles alarmantes en algunos sectores de la sociedad dominicana. Etiquetar a los inmigrantes como “invasores” o enemigos internos solo contribuye a sembrar discordia y desconfianza. Aunque es improbable que el gobierno haya planificado estas deportaciones con esa intención, es crucial reconocer y combatir las ideas perjudiciales que rodean este tema. Es fundamental buscar soluciones que promuevan la inclusión y el respeto mutuo en lugar de la división y la discriminación.
Extra: El papel de la retórica en la formación de políticas migratorias.