¿Quién cuida del bienestar de los niños y niñas?
Es de dominio público que el progreso de una nación se evalúa por su trato hacia los grupos más vulnerables, entre ellos, la infancia. Por esta razón, existe una demanda histórica para que el gobierno y la sociedad en República Dominicana brinden una mayor atención y apoyo a los niños y adolescentes, reconociendo que serán los pilares del mañana.
Es común que muchos adultos arrastren cicatrices emocionales de su niñez, causadas por situaciones como abandono, violencia o abuso sexual. Estas heridas suelen reflejarse en la vida adulta, generando individuos con comportamientos violentos, ansiosos o poco productivos, afectando negativamente a la sociedad en su conjunto.
A pesar de que el impacto social de invertir en la niñez y adolescencia no sea tan tangible como la infraestructura, es crucial para el desarrollo sostenible de cualquier país.
La importancia de invertir en la infancia y adolescencia
Para lograr una mejora significativa en este sector social, es vital contar con una visión clara de la situación actual y la voluntad política para implementar cambios efectivos. Todo esto debe ir acompañado de un mayor presupuesto y la designación de personas capacitadas en la toma de decisiones.
Recientemente, presencié dos eventos que reflejan un avance positivo en la atención a la infancia en República Dominicana, donde diferentes entidades están trabajando de manera coordinada en beneficio de los niños y niñas del país.
En primer lugar, el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI) presentó su informe institucional para el período 2020-2024, destacando logros como la reducción significativa de embarazos en adolescentes y la atención a aquellos en situación de vulnerabilidad.
Además, la creación del Gabinete de Niñez y Adolescencia (GANA) ha favorecido la coordinación eficaz entre las diferentes instituciones y esfuerzos que trabajan en favor de la infancia en el país.
Por otro lado, en conmemoración del Día Internacional de la Niña, Plan Internacional República Dominicana lideró una actividad enfocada en dar voz a las niñas y sus demandas por un entorno más seguro, limpio y libre de violencia.
A pesar de los avances, aún existen desafíos que deben abordarse de manera urgente, como la necesidad de que la protección y visibilización de las niñas se convierta en una práctica diaria y que los hombres asuman un rol activo en la crianza y la lucha contra la violencia de género.
En resumen, como mencionó Nelson Mandela, la atención y cuidado de la niñez no solo es una responsabilidad, sino también la base fundamental para construir un futuro próspero y equitativo para toda la sociedad.