Impacto de la integración entre dos entidades académicas en el 4% asignado a la enseñanza
Recientemente, el gobierno de la nación caribeña dio a conocer la propuesta de fusionar el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Mescyt) con el Ministerio de Educación de la República Dominicana (Minerd), como parte de un proceso de reestructuración.
Esta medida ha generado interrogantes sobre la distribución del 4% del Producto Interno Bruto (PIB) reservado para el sector educativo.
En esta línea, el titular del Ministerio de Administración Pública (MAP), Sigmund Freund, expresó que si bien este presupuesto ha sido un reclamo histórico y un logro significativo, su ejecución ha descuidado a las instituciones universitarias, impactando de forma negativa en esta esfera.
Según sus palabras, la educación conforma un todo indivisible, sin distinciones entre educación básica, secundaria y universitaria. Esta separación ha generado una desconexión en los contenidos de los distintos niveles educativos.
El objetivo gubernamental es impulsar una perspectiva integral que abarque desde la educación inicial hasta la universitaria, promoviendo un plan de estudios coherente y unificado.
Se destaca que la división existente entre la educación secundaria y la educación universitaria ha tenido consecuencias perjudiciales, al generar dos enfoques educativos aislados y divergentes.
En este sentido, se señala que la acción del presidente busca, por primera vez, establecer una visión coherente y completa en el ámbito educativo.