Análisis del comportamiento inflacionario en República Dominicana hasta junio
En el mes de junio, la evolución del índice de precios al consumidor en República Dominicana presentó una tasa anual de 3,46%, lo cual se encuentra por debajo de la meta inflacionaria propuesta de 4,0 % ± 1,0 %. Este comportamiento se observó por séptima vez sucesiva. Además, el aumento de precios durante el mes se situó en 0,48%, según lo anunció el Ministerio de Economía en una reciente publicación.
Durante el mismo período, la escalada de precios sin incluir alimentos frescos y combustibles, conocida como inflación subyacente, alcanzó un 3,98%, lo que representa una disminución de 1,35 puntos porcentuales en comparación con junio del año anterior, según se extrajo del ‘Informe de situación macroeconómica- Seguimiento de coyuntura’ emitido por el departamento de Economía, Planificación y Desarrollo.
En el incremento de precios por categoría dentro del mes de junio, destacaron los segmentos de alimentos y bebidas no alcohólicas con un aumento mensual de 0,75% y un impacto del 0,19% en la tasa general; seguido por el transporte, con un ajuste del 0,61% y un aporte a la inflación del 0,11%; y los bienes y servicios diversos, que registraron un avance del 0,63% y contribuyeron con un 0,07% al índice global de precios.
Desde el ministerio se proyecta que la inflación interior se mantenga contenida, anticipándose un índice promedio de 3,50 %, de acuerdo a las previsiones económicas actualizadas hasta junio de 2024.
Con respecto al valor cambiario del peso frente al dólar, se percibió una depreciación anual del 7,0%, estableciéndose el cambio en 58,99 pesos por cada dólar estadounidense. Este informe también destaca una depreciación del 6,5% en el índice de cambio real interanual.
Expectativas futuras sobre la inflación y el mercado cambiario
A partir de los datos y proyecciones divulgadas por el Ministerio de Economía, se anticipa un escenario económico estable en términos inflacionarios para República Dominicana. Este análisis resulta alentador para los actores económicos, dado que una inflación controlada es sinónimo de estabilidad y previsibilidad, elementos clave para el fomento de la inversión y el crecimiento económico a largo plazo.
En relación al tipo de cambio, la depreciación del peso dominicano refleja desafíos y oportunidades para el comercio exterior y las políticas monetarias. La gestión de esta variable será fundamental para asegurar un equilibrio que favorezca la competitividad sin comprometer la accesibilidad a bienes y servicios fundamentales para la población.