Impacto del Impuesto del 16% en Bancas de Loterías y Deportivas
Representantes del sector de bancas de loterías y deportivas consideran que la aplicación del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) del 16%, según lo propuesto en la Reforma Fiscal, sería impracticable. Ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, expresaron su preocupación por las posibles consecuencias que esta medida podría tener en su industria.
En caso de que esta propuesta se convierta en ley, advierten que la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) estaría sentenciando al cierre a miles de bancas operativas en todo el país. Para los representantes de la Federación Nacional de Bancas de Loterías, la viabilidad del ISC es cuestionable y, de implementarse, se enfrentarían a una crisis que llevaría al cierre de numerosos establecimientos.
Se estima que el Estado dominicano pierde entre 4 y 5 mil millones de pesos debido a la alta presencia de negocios informales que eluden el pago de impuestos. Esta situación pone de manifiesto la necesidad de controlar la informalidad en el sector para incrementar la recaudación fiscal.
De acuerdo con un informe de la DGII, la recaudación proveniente de las bancas de loterías y deportivas ha experimentado una disminución del 15.6% en el primer trimestre de 2020 con respecto al mismo periodo del año anterior, reflejando la fragilidad del sistema actual.
Reto en la Recaudación y Disminución de la Informalidad
La aplicación de una indexación anual a los permisos de operación de las bancas de loterías, en lugar de aumentar los ingresos tributarios, ha generado una contraproducente reducción en la recaudación. Este fenómeno se atribuye a la falta de control y a prácticas corruptas que han perjudicado al sector y a los pequeños empresarios que lo integran.
Para Jefry Espinal, vicepresidente de la Asociación Dominicana de Bancas de Deportivas, trasladar el ISC a los clientes es inviable, ya que podría tener efectos negativos contrarios a los previstos por el Gobierno. En su lugar, sugiere que se implemente la Ley 139-11, que regula el sector y ofrece un potencial significativo para aumentar las recaudaciones fiscales de manera más efectiva.
Esta ley propone la interconexión de todas las bancas deportivas y máquinas tragamonedas a través de un sistema unificado, lo que permitiría al Estado aumentar la captación de ingresos de forma más eficiente. Espinal también destaca el alto nivel de informalidad en el sector, señalando que una imposición adicional del ISC podría tener consecuencias aún más perjudiciales, aumentando la informalidad hasta un 75%.
Según datos revelados, las bancas deportivas contribuyen con mil 500 millones de pesos anuales al fisco y son responsables de aproximadamente 200 mil puestos de trabajo en el país, lo que resalta su importancia económica y social en la comunidad.