Medidas a tomar por violar las liberaciones
Las liberaciones, reguladas por la legislación como un beneficio para que los legisladores en el territorio pudieran tener un respaldo logístico que les permitiera cumplir con sus obligaciones, tales como participar en sesiones del Congreso, asistir a reuniones en distintas zonas de su área legislativa y visitar comunidades remotas o distritos alejados unos de otros, justificando dicho beneficio como una facilidad para que los legisladores adquieran medios de transporte idóneos y seguros.
Se ha debatido ampliamente sobre la posibilidad de eliminar estas liberaciones: manifestaciones, discusiones en grupos académicos y propuestas legislativas que no han tenido éxito en la cámara, ya que siempre hay una oposición a que los dignatarios legislen para disminuir sus privilegios, a pesar de ser una demanda constante de la sociedad. No obstante, el tema siempre regresa a la mesa y las liberaciones acaban convirtiéndose en vehículos de lujo que, a pesar de la clara definición en la ley de su propósito, los flamantes legisladores lo hacen a la vista de las autoridades y, en caso de accidentes, públicamente se deslindan del suceso trágico alegando que vendieron el beneficio, sin recibir ningún tipo de reclamo fiscal por los impuestos exonerados.
¿Cuál es la situación legal al respecto?
Curiosamente, los legisladores parecen estar por encima de la ley, ya que la Ley No. 57-96 actual no establece castigos por la simulación de la compra de un automóvil, lo que restringe el rol de las autoridades fiscales, permitiendo así la venta de liberaciones. Se estima que en el año 2021 se importaron aproximadamente 1,148 vehículos a nombre de legisladores, lo que ocasionó que el Estado dominicano dejara de percibir alrededor de RD$2,649.8 millones en impuestos, una cifra que, además de alarmante, genera indignación, dado que a usted, estimado lector, se le exigen impuestos hasta por el alma.
Los legisladores han mostrado resistencia de diversas maneras a la eliminación de las liberaciones, pero tampoco consideran establecer un marco de sanciones para prevenir su uso inapropiado. Estas negativas históricas a las demandas ciudadanas han permitido que individuos ajenos a la política ocupen posiciones de poder y desestabilicen naciones de Latinoamérica.
¿Qué están esperando los legisladores? Aprovechemos la oportunidad y realicemos cambios: supriman las liberaciones o incluyan castigos para quienes las comercialicen, porque incluso Dios no pasaría por alto tanta injusticia.
Reflexión adicional sobre transparencia y responsabilidad
Es crucial que los legisladores entiendan que la transparencia y la responsabilidad son fundamentales en un sistema democrático. Es imperativo que se establezcan mecanismos efectivos para evitar el abuso de privilegios y garantizar la rendición de cuentas en beneficio de la sociedad en su conjunto. La confianza de los ciudadanos en sus representantes políticos se construye a través de acciones concretas que promuevan la equidad y la justicia en el ejercicio del poder. Es responsabilidad de los líderes legislativos actuar con integridad y compromiso para fortalecer la democracia y garantizar que las decisiones tomadas en el ámbito público sean en interés del bien común.