Confiscación del avión presidencial por Estados Unidos
Las autoridades estadounidenses han tomado posesión del avión perteneciente al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, luego de determinar que su adquisición contravenía las sanciones impuestas por Estados Unidos, así como otras implicaciones legales. El traslado del avión a Florida el pasado lunes, según fuentes oficiales estadounidenses, marca un hito en la ya tensa relación entre ambos países y representa un paso más en la investigación de prácticas corruptas que se atribuyen al gobierno venezolano.
Se ha identificado la aeronave como el equivalente venezolano del Air Force One y ha sido protagonista en anteriores visitas de estado realizadas por Maduro en distintas naciones alrededor del mundo.
El fiscal general Merrick Garland, en un comunicado, declaró que el Departamento de Justicia confiscó el avión, el cual se alega fue adquirido ilegalmente por 13 millones de dólares a través de una empresa ficticia y sacado ilegalmente de Estados Unidos para uso de Nicolás Maduro y sus asociados.
El Dassault Falcon 900EX fue adquirido de una empresa con sede en Florida y fue exportado de forma ilegal en abril de 2023 desde Estados Unidos a Venezuela a través del Caribe. Se utilizó principalmente para los desplazamientos internacionales de Maduro y operó mayormente entre Venezuela y una base militar, según detalla el Departamento de Justicia.
Reacciones del gobierno venezolano y escalada de tensiones
El gobierno venezolano calificó la incautación como un acto de “piratería” en un comunicado emitido el lunes, acusando a Washington de intensificar la “agresión” hacia el gobierno de Maduro tras las recientes elecciones polémicas. Se denunció que, una vez más, las autoridades estadounidenses llevaron a cabo una confiscación ilegal sustentada en medidas coercitivas impuestas unilateralmente a nivel global.
Las agencias federales, incluida la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), han estado trabajando activamente durante años para frenar los flujos de dinero hacia el régimen venezolano. Hasta la fecha, se han confiscado varios bienes, entre ellos vehículos de lujo, que tenían como destino Venezuela.
En un comunicado, Anthony Salisbury, agente especial a cargo de las Investigaciones de Seguridad Nacional, mencionó que la incautación del avión se llevó a cabo en violación de las sanciones impuestas por Estados Unidos, así como por otros asuntos criminales que están bajo investigación. Se destaca la colaboración entre las autoridades estadounidenses y República Dominicana en este proceso.