En un reciente acto ante líderes empresariales y figuras destacadas de la comunidad, el Jefe de Estado, Luis Abinader, expuso su plan de Reforma Constitucional, que tiene como objetivo principal blindar los pilares democráticos del país. Las medidas propuestas incluyen la prohibición de la reelección más allá de dos periodos, la disminución en el número de legisladores, la sincronización de los calendarios electorales para ejecutivos, legislativos y municipales, además de asegurar la autonomía del órgano fiscalizador legal.
El presidente detalló durante la reunión “LA Semanal” en Palacio que el fin de esta iniciativa es potenciar la justicia, la transparencia y los valores democráticos que el gobierno ha promovido. Según sus palabras, esta reforma se formula pensando en el interés común y en fortalecer los fundamentos de nuestra democracia.
Se ha avanzado que este proyecto se llevará al Congreso el 16 de agosto para su discusión y posterior aprobación, tras someterlo a un proceso de consenso y análisis con variados grupos representativos de la nación.
Entre las cláusulas que se incluirían en la propuesta, se encuentra una que busca asegurar el modelo de elección presidencial actual, es decir, dos términos seguidos sin la posibilidad de una reelección posterior, como una barrera más contra la erosión democrática.
Adicionalmente, propone integrar condiciones transitorias que recalcan la inelegibilidad del presidente actual para futuras postulaciones, argumentando que estas disposiciones evitarían cualquier ambigüedad sobre las limitaciones de reelección y garantizarían la estabilidad política.
El documento también aboga por una reducción significativa de la Cámara de Diputados, de 190 a 137 miembros, lo cual, según las proyecciones, debería traducirse en un considerable ahorro para los fondos públicos y permitiría redistribuir esos recursos hacia el desarrollo amplio del país.
Además, sugiere la armonización de los procesos electorales municipales, legislativos y presidenciales para el año 2032, lo cual, en palabras de Abinader, resultaría en una considerable economía de recursos estatales, simplificando la logística y reduciendo los periodos de campaña.
Otra propuesta es garantizar que el cargo de procurador general no pueda ser removido durante cada periodo presidencial, excepto en casos de faltas graves que ameriten un juicio político.
La iniciativa subraya la importancia de mantener la independencia del Ministerio Público, estableciendo que el procurador general sea elegido por el Consejo Nacional de la Magistratura, a instancias de la presidencia, reforzando así la división y equilibrio de poderes.
Este proyecto plantea, igualmente, ajustes en la composición del Consejo Nacional de la Magistratura, reduciendo sus miembros de ocho a siete, e impidiendo la participación del MP en la definición de las políticas de prevención del delito, tarea que quedaría exclusivamente en manos del Ejecutivo.
Abinader resumió el proyecto destacando cuatro pilares esenciales: asegurar la estabilidad electoral presidencial, fortalecer la independencia del Ministerio Público, unificar los calendarios electorales y disminuir el número de representantes en Diputados, todo con miras a consolidar una democracia más robusta y un gobierno más eficiente.
Finalmente, recalcó la preocupación histórica por las constantes modificaciones constitucionales orientadas a extender los plazos del poder ejecutivo en la República Dominicana, cifrando en más de 31 las veces que esto ha sucedido, y afirmó que su propuesta apunta a terminar con esa práctica.
Hizo hincapié en que, durante la presentación del proyecto al Congreso, buscará que los diputados omitan debates que impliquen conflictos de interés, especialmente en lo concerniente a la propuesta de reducción del número de estos.