La iniciativa celebra el compromiso de las progenitoras con la lactancia durante todo su periodo.
Con la visión “Uniendo esfuerzos para el respaldo de la lactancia materna en diversos contextos”, la Jornada Internacional de Promoción de la Lactancia Materna 2024 se propone garantizar que cualquier madre que elija la lactancia pueda llevarla a cabo exitosamente, sin importar su situación particular.
Este evento global tiene lugar anualmente del 1 al 7 de agosto desde 1992, cubriendo aspectos importantes como salud pública, entornos laborales, respaldo de la comunidad, sostenibilidad ecológica, beneficios económicos, avances científicos, educación y derechos civiles.
Orquestada por la Alianza Global pro Lactancia Materna (WABA por sus siglas en inglés), esta campaña mundial tiene como objetivo educar, sostener, involucrar y fomentar actividades a favor de la lactancia materna. La WABA destaca como la insuficiencia de soporte en la primera semana postparto puede disminuir significativamente la decisión y continuidad de la lactancia.
Investigaciones indican que la interrupción temprana de la lactancia durante las primeras tres semanas es mayoritariamente atribuida a un deficiente acceso a información y respaldo para las madres y sus familias.
En este ciclo, la Jornada Internacional de Promoción de la Lactancia Materna se esfuerza por eliminar las barreras de apoyo, señalando la relevancia de que las madres reciban el respaldo necesario. Este año, se subraya cómo un exitoso proceso de lactancia beneficia no solo a la salud de madre e hijo, sino que contribuye favorablemente a la sociedad.
La edición 2024 de esta jornada es una ventana para intensificar el compromiso internacional bajo el eslogan “Uniendo esfuerzos para el respaldo de la lactancia materna en diversos contextos”.
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Añadiendo más valor a la importancia de esta celebración, es fundamental que la sociedad entienda la lactancia materna no sólo como un acto de amor, sino como una práctica esencial para el desarrollo sostenible. Innovadoras investigaciones demuestran cómo la lactancia materna puede influir positivamente en la reducción de la pobreza, garantizar la seguridad alimentaria en los hogares y combatir el cambio climático, al reducir la necesidad de productos de alimentación artificial y los desperdicios que estos generan.
Además, la Semana Mundial de la Lactancia Materna ofrece una plataforma única para dialogar sobre los desafíos que enfrentan las madres en la actualidad, desde la carencia de espacios adecuados para amamantar en lugares públicos hasta la necesidad de políticas laborales que respalden la lactancia materna. Este enfoque integral pone de manifiesto la necesidad de un cambio cultural y estructural que promueva la lactancia materna como una norma aceptada y apoyada en todos los ámbitos de la sociedad.