Los dirigentes de la iglesia dominicana, Santiago Rodríguez Rodríguez y Carlos Tomás Morel Diplán, destacaron las iniciativas del Papa Francisco hacia una iglesia que incluye más a las mujeres en sus estructuras de poder y pensamiento.
Resaltaron la importancia de la inclusión de Concetta Brescia Morra como parte del Consejo de la Autoridad de Supervisión e Información Financiera (ASIF) del Vaticano, marcando un hito en la ocupación femenina de roles relevantes dentro de la institución.
Applaudieron la sustitución en ASIF, señalando como un logro que Brescia Morra reemplace a Antonella Sciarrone Alibrandi, quien ha sido asignada como jueza en el Tribunal Constitucional italiano, destacando la continuidad de la presencia femenina en el ente financiero vaticano.
El presidente Abinader manifiesta preocupación por las elecciones en Venezuela.
El obispo Rodríguez Rodríguez expresó su entusiasmo por el nombramiento de Brescia Morra, observando la creciente presencia de mujeres en posiciones de influencia dentro del Vaticano y en organismos latinoamericanos como el CELAM.
Mencionó que un buen número de mujeres que colaboran con la iglesia son laicas y religiosas, fuera de los roles clericales tradicionales.
Comentó sobre las vestimentas, señalando que en ciertas congregaciones, sus miembros llevan ropa convencional, similar a la que utilizan las profesoras en su diócesis, que dirigen el Instituto de Educación Superior (IES) para formación docente.
Rodríguez resaltó la iniciativa de su diócesis por incorporar a las mujeres en la estructura eclesiástica, como lo demuestra la apertura de la Escuela para Diácono Permanente y la Escuela para Acolitado, esta última pensada para la formación de mujeres como ministras extraordinarias del Altar.
Afirmó tener un claro interés por fomentar la participación femenina en los ámbitos eclesiásticos desde la fundación de estas escuelas en su jurisdicción.
Destacó la significativa participación de mujeres en programas de formación, subrayando su futuro papel activo en las comunidades de fe, donde podrán ejercer roles como la celebración de la Palabra, la comunión e impartir catequesis, complementando la labor del sacerdote y el obispo en el altar.
Desde su formación para el sacerdocio en el año 2000, el obispo ha observado el creciente protagonismo femenino en la iglesia, destacando especialmente a tres mujeres enviadas a Colombia para un diplomado que posteriormente liderarán un programa de capacitación.
Recalcó la capacidad de integrar mujeres en el Tribunal Eclesiástico, como ya sucede en la República Dominicana.
Visión de Morel Diplán
El obispo Morel Diplán, al mando de la diócesis de La Vega y auxiliar en Santiago de los Caballeros, hizo énfasis en el significado que tiene la elección de Brescia Morra para la ASIF, profundizando el papel de la mujer en las dinámicas eclesiales.
Hizo hincapié en el papel crítico que juegan las mujeres en la evangelización y en la formación catequética, donde su compromiso y labor educativa son insustituibles.
Contribuciones y Perspectivas
Este realce de las contribuciones femeninas en el contexto eclesiástico muestra un cambio significativo en cómo se percibe el rol de las mujeres dentro de la estructura de la Iglesia Católica. A través de su incorporación en roles de decisión y liderazgo, tales como los ocupados por Brescia Morra y Sciarrone Alibrandi, se promueve una visión más inclusiva y renovada de la fe.
Además, la formación de mujeres en áreas tradicionalmente reservadas para los hombres, como es el caso de las escuelas para diáconos y acólitos mencionadas por Rodríguez Rodríguez, ilustra un esfuerzo consciente por valorar el aporte femenino no solo en la congregación sino en las estructuras de liderazgo eclesiástico. Este proceso de inclusión responde no solo a un imperativo de igualdad, sino que enriquece la práctica religiosa al incorporar una diversidad de voces y perspectivas.