El desafío de las instituciones penitenciarias
Desde hace mucho tiempo, el tema de las prisiones ha sido un tema relevante para la sociedad debido a las sanciones impuestas y las noticias impactantes que surgen de actos delictivos. Los centros de reclusión buscan constantemente formas de mejorar el trato hacia los internos.
Además, la idea de reformar el sistema penitenciario se centra en la necesidad de un enfoque más racional y humano, promovido por los gobiernos que buscan atender este problema sin destinar suficientes recursos económicos ni esfuerzos para la reintegración social de los reclusos. Es importante reconocer las diferentes formas en las que la delincuencia ejerce su control en las prisiones, más allá de los delitos individuales.
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Recientemente tuve la oportunidad de visitar un centro penitenciario en La Vega. Lo más impactante fue observar la gran cantidad de jóvenes que cumplen condena allí, con sus vidas alteradas y la falta de oportunidades para la reflexión y la reinserción. A pesar de los esfuerzos y recursos destinados a mejorar el sistema penitenciario, la creatividad delictiva parece superar las medidas tomadas, encontrando cómplices entre las autoridades encargadas de la vigilancia y sanción.
Los datos revelan que el 36% de los robos con celulares y el 85% de las llamadas engañosas provienen de las cárceles, utilizando dispositivos robados. Por esta razón, desde el Indotel se plantea la importancia de implementar bloqueadores para evitar el uso ilegal de celulares desde las prisiones, cerrando así una brecha utilizada por los criminales para violar la ley en República Dominicana.
El Indotel busca colaborar activamente con los recursos necesarios para mejorar la situación, como la instalación de bloqueadores en cuatro prisiones como piloto, con el objetivo de extender esta tecnología al resto del sistema penitenciario, supervisada de manera inteligente para prevenir cualquier actividad delictiva.
Es responsabilidad de todas las instituciones evitar que las cárceles se conviertan en escuelas del crimen, afectando la seguridad de los ciudadanos con sus actividades fraudulentas. Se necesita un esfuerzo colaborativo para contener las prácticas delictivas que han estado ocurriendo desde hace mucho tiempo en diferentes prisiones.